Hace un año Huelva vio nacer «su Saeta». Dedicada a la Virgen de los Dolores de la Hermandad de la Merced onubense, Cristóbal López Gándara cogió el testigo de Gámez Laserna, quien con su Saeta Cordobesa creó lo que ya es un himno en la Semana Santa de su ciudad. En plena madurez compositiva nació El Cachorro, Saeta Sevillana. Músicos del nivel de David Hurtado o José Manuel Bernal han seguido los pasos del maestro galduriense con resultados sobresalientes.
No iba a ser menos López Gándara, quien deja su impronta nada más comenzar la marcha. Todas las anteriores finalizan con la saetilla. Aquí se nos presenta desde el comienzo. Emotiva, rotunda, delicada. Es Semana Santa en estado puro. En estos días de víspera de la semana más bonita del año, esta Saeta Onubense nos traslada en tiempo y espacio a ese rincón feliz e idílico de nuestra memoria. Estamos ante una de esas marchas universales. Siempre que pienso en esta marcha pienso en la injusticia cometida con Valle de Sevilla. Que no tengan que pasar 25 años para que tenga el hueco que merece en los repertorios de toda la geografía andaluza. No cuento nada más porque la verdadera protagonista debe ser la música.
Basílica de la Esperanza Macarena. Interpreta, de manera magistral, la Banda de Música del Maestro Tejera. Suena Dolores – Saeta Onubense:
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